INCLUYE EL CAFÉ EN TU RUTINA DE BELLEZA
¿Os encanta beber a diario vuestra taza del mejor café de Café & Company?
Seguro que la respuesta es afirmativa.
Pero y si os contásemos que esos pequeños granos mágicos de café son todo un regalo para nuestro cuerpo.
Si, si, habéis leído bien: el café puede ser un gran aliado en nuestros hábitos de belleza y es tan sencillo comprobar los resultados, que podéis empezar ya.
Tómate un café, relájate y prepárate para disfrutar de los beneficios de esta fantástica bebida.
Cabello:
Mascarilla de café para pelo débil.
Una mascarilla que revitaliza y fortalece el cabello.
- 4 cucharadas de café molido
- 1 vaso de agua mineral
- Gorro de ducha o toalla .
- Prepara una taza de café
- Espera a que el café se enfríe.
- Lava el pelo con tu champú habitual y aclara.
- Aplica la mascarilla de café por todo el pelo haciendo suaves masajes con las yemas de los dedos.
- Cubre el cabello con un gorro de ducha o una toalla vieja. Dejarla actuar durante unos 15 minutos.
- Enjuaga con abundante agua y aplica tu mascarilla habitual para suavizar el pelo.
Ojos:
¿Tienes ojeras o marcas alrededor de los ojos?
El café puede ayudarte y mucho…
Esta magnífica bebida reactiva la circulación sanguínea y es muy eficaz para desinflamar la zona de alrededor de los ojos.
Sólo hay que preparar una taza de café cargado y ponerlo en el congelador. Una vez que esté bien frío, empapa una gasa de algodón y déjala reposar bajo tus ojos por algunos minutos. Enjuaga, colócate crema hidratante y ¡magia! Tus ojos mucho más desinflamados y descansados.
Piernas:
Seguro que habías escuchado que el café es un ingrediente ideal para ayudar a combatir la celulitis. Esto se debe a que este alimento reactiva la corriente sanguínea y ayuda al movimiento de los lípidos.
¿Cómo aplicarlo? Pues muy sencillo,en un recipiente mezcla tres cucharadas grandes de miel y tres de café molido e integra hasta formar una pasta. Una vez que tenga la textura adecuada aplícala sobre muslos, glúteos o piernas. Masajea con movimientos circulares por algunos minutos y enjuaga con abundante agua.
Este proceso puede repetirse unas tres veces por semana.
Bueno, solo esperamos que a partir de ahora sigáis disfrutando muchísimo del café y que lo hagáis tanto por dentro como por fuera.
¡Ya nos contaréis qué tal os van estos consejos cafeteros!