MIENTRAS DISFRUTO CON MI CAFÉ ME DOY CUENTA DE QUE ESTOY MEJOR QUE NUNCA ¿MAYOR? ¡NO!, AHORA VIVO EN MODO EXPERTO.

MIENTRAS DISFRUTO CON MI CAFÉ ME DOY CUENTA DE QUE ESTOY MEJOR QUE NUNCA ¿MAYOR? ¡NO!, AHORA VIVO EN MODO EXPERTO. 1200 1200 admin

MIENTRAS DISFRUTO CON MI CAFÉ DE CAFÉ&COMPANY ME DOY CUENTA DE QUE ESTOY MEJOR QUE NUNCA ¿MAYOR? ¡NO!, AHORA VIVO EN MODO EXPERTO.

No soporto escuchar eso de que, a partir de una determinada edad, uno es demasiado mayor para hacer ciertas cosas ¿quién juzga cuándo rebasas esa edad en la que empiezas a ser demasiado mayor?,y ¿por qué tenemos que dejar de hacer ciertas cosas sólo por la edad?, ¿es que nuestro cuerpo y nuestra mente de personas adultas nos incapacitan para seguir disfrutando de la vida?.

Y es que, a pesar de haber superado los cuarenta, de tener más arrugas, más lorzas y más cansancio que hace unos años, a pesar de que a veces me traten de usted , sigo siendo joven ¡Seguimos siendo jóvenes! ¿Quién cuestiona que no?

Hay muchas cosas valiosas que se adquieren con el paso del tiempo y las vivencias y es esta la única forma intentar alcanzarlas. No es que todo el mundo como norma las tenga, pero

¿Cuáles?

-Otro sorbo a mi café de máquina de vending 100% natural calidad Gourmet- ¡Delicioso!, ahora soy más capaz de distinguir y apreciar un buen café

Seguridad

Saber realmente quiénes somos y no buscar compararnos con el resto es un privilegio que te permite vivir una vida mejor. No hay atuendo más sexy que la seguridad en uno mismo. Es una cuestión madurativa que no siempre se vincula a la edad, pero el tiempo y las vivencias aportan seguridad.

Gozar de mayor libertad.

Los niños crecen y emprenden su camino y eso nos permite empezar a movernos de nuevo en nuestra propia dirección.

Te vuelves un experto en el ámbito profesional

Lo más probable es que en esta etapa te encuentres en la cumbre de tu vida profesional, experiencia y ganas a partes iguales. Seguimos activos, curiosos y con muchas ganas de seguir aprendiendo y creciendo.

Tienes tiempo para hacer ejercicio

Se saca tiempo para dedicarlo a nuestro bienestar físico y emocional y con entrenamiento y constancia se obtiene un rendimiento físico mucho más que bueno ¡Estupendo!

Compras con criterio y sabes cuidarte

Así de simple, sabes elegir los alimentos adecuados e integrarlos funcionalmente en un estilo de vida saludable y equilibrado.

Dedicas tiempo a nutrir tu mente

Sabes canalizar el estrés mejor y priorizar las cosas. Has aprendido a detenerte y pensar para coger impulso. Cuidar nuestros pensamientos, sentimientos y emociones nos hace fuertes mental y físicamente.

Resuelves los problemas más fácilmente

Nos volvemos resolutivos, prácticos y sabemos dirigir los esfuerzos en la dirección adecuada. Esto nos permite afrontar los problemas de otro modo y resolverlos antes.

Te rodeas de las personas que te aportan y te nutren

Dejamos de tener contacto con gente que nos resulta tóxica. Somos mucho más selectivos con nuestro círculo de amistades. Ya sabes quién es indispensable en tu vida y de quién puedes prescindir.

Aún somos capaces de hacer muchísimas cosas porque nuestras ganas de mirar a la vida de frente no tienen límites.

Claro, a tu edad es diferente, hay cosas que

¿Perdona? ¿Y me lo dices tú..? Que sólo por insinuar algo así ya me estás dando derecho a imaginarte dentro de unos años…

A mi edad y a otras muchas edades te sorprendería lo que somos capaces de hacer, es la naturaleza y el carácter de las personas lo que condicionan su actitud frente a la vida y no la edad.

A nuestros X años somos capaces de:

Salir una noche y aguantar hasta las 7.00 de la mañana, aunque no lo hagamos todos los días.

Hacer topless en la playa, practicar deportes acuáticos y tirarnos de bomba a la piscina.

Coger un vuelo a las 6.00 de la mañana por ahorrarnos unos euros y dormir apenas 3 horas a la vuelta de un viaje e ir a trabajar muriendo de sueño.

Alojarnos en albergues, aunque en general prefiramos invertir nuestro dinero en lugares un poco menos concurridos y con una higiene más cuidada.

Llevar ropa interior de dibujos animados y sacar morritos en las fotos.

Cantar y gritar en los conciertos y pasarnos el día siguiente sin apenas voz…

Conducir con la música a todo volumen y la ventanilla bajada.

Pintarnos las uñas de colores y el pelo si se nos cruza ¿porqué no?

Cantar en la ducha bien alto y bailar con las canciones que nos gustan y nos hacen vibrar como si no hubiera un mañana.

Ver películas insustanciales, de las de “no pensar”, comiendo unas palomitas.

Ponernos colorados y tontorrones si alguien nos gusta…

Llorar con los dibujos animados como si no hubiéramos visto morir a Mufasa o la madre de Bambi mil veces.

Emborracharnos de vez en cuando, y con dignidad porque se te va de las manos un buen vino o unas cuántas cervezas compartidas en buena compañía.

Ir a mi máquina de vending favorita y sacar unos Cheetos.

Comer Nutella, pizza, hamburguesa y cenar el viernes un menú de comida basurilla con el que llevas soñando toda la semana, porque para eso llevas una rutina de ejercicio envidiable y perfecta.

Beber cerveza de la lata cuando toca. Que si, que preferimos un buen vino en copa grande y glamourosa, pero nos hemos convertido en adultos, no en miembros de la alta sociedad, ¡Dame una lata de Mahou y déjate de tonterías! Y unos panchitos para picar, por favor.

Seguir estudiando. Nunca es tarde para aprender cosas nuevas, para estimular nuestro cerebro. El dinamismo y las ganas de aprender siempre por bandera.

Soñar. Soñar con viajes, con planes, con nuestro futuro. Con cambiar ciertas cosas y mantener otras, solos o en compañía, como cada uno prefiera.

Llorar.

Ponernos esa camisetas que nos hacen sentir bien, libres y cómodos.

Somos jóvenes para seguir haciendo todas las cosas que hemos hecho los últimos años, porque aunque tengamos responsabilidades adultas, trabajos, alquileres o hipotecas, maridos e hijos, seguimos siendo las mismas personas, con distinto número en la tarta de cumpleaños.

No dejes que nadie te diga que eres demasiado mayor para seguir haciendo lo que quieres, lo que te hace superarte cada día lo que te gusta.

Porque nunca se es demasiado mayor para no poder seguir siendo joven…

Os sorprendería saber que en nuestro equipo de trabajo hay auténticos atletas, y que no tengan 20 años no quiere decir que solo se muevan un poquito, no…Tienen marcas y tiempos de auténtico récord y están muy, pero que muy en forma.

En Café & Company damos mucha importancia a tener un estilo de vida saludable físico y mental independientemente de edades numéricas, solo la mente pone límites y barreras a las personas.

Siempre existe una actividad o un deporte que se adapta a la perfección a nuestras características físicas, que dependiendo de unas u otras etapas pueden ser diferentes, pero ¡No hay excusas para moverse!

Es verdaderamente sorprendente lo que el ejercicio físico puede hacer por nosotros y ya si nos alimentamos con criterio sumamos puntos.

¿Os animáis a probar? Venga, una caminata con ritmo de 30 minutos es ideal para activar cuerpo y mente, y ¡Avisamos! una vez que lo probéis ya no podréis parar…¡Ya nos contaréis!

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